21.3.08

La hija del fletero





a hija del fletero, linda infinita

volvió a Madrid, donde parece que es feliz

ese día me mando al descenso

recuerdo como su mirada me volteó

Pero dos que se quieres, se dicen cualquier cosa

Ay ! si pudieras recordar sin rencor.

En mi buzón hay un par de cartas suyas

fueron juntandose y no tengo el valor...

Todavía su amor me descargas

(nunca tuvo higo seco junto a mi)

Pero a los ciegos no les gustan los sordos

y un corazón no se endurece por que sí

No calentás la misma cama por dos noches

me reclamaba y no la quise oír

hice de todo por impresionarla

y dejé huérfano todo su penar

No me gustó como nos despedimos

daban sus labios rocío y no bebí

Sopa de almejas es todo lo que como

(Siempre fui menos que mi reputación)

14.3.08

LO FATAL



Dichoso el árbol, que es apenas sensitivo,
y más la piedra dura porque ésa ya no siente,
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.

Ser, y no saber nada, y ser sin rumbo cierto,
y el temor de haber sido y un futuro terror...
¡Y el espanto seguro de estar mañana muerto,
y sufrir por la vida y por la sombra y por

lo que no conocemos y apenas sospechamos,
y la carne que tienta con sus frescos racimos,
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos
y no saber adónde vamos,
ni de dónde venimos!...

13.3.08